Estreñimiento y varices

Las varices son venas dilatadas y retorcidas muy visibles debajo de la piel que aparecen como consecuencia de distintos factores de riesgo, como la obesidad, fumar, el embarazo y el estreñimiento. ¿Afecta también el estreñimiento a las varices?

Al inicio las venas varicosas son solo un problema estético, pero con el pasar del tiempo pueden transformarse en una verdadera preocupación, ya que aumentan el riesgo de otras condiciones y predisponen a síntomas severos que cambian tu día a día.

Existen muchas maneras de prevenirlas o retrasar su aparición, y entre ellas destaca cuidar la alimentación y prestar atención a tu salud intestinal.

Descubre cómo hacerlo a continuación.

Las varices: ¿Qué son y cuáles son sus síntomas?

También llamadas venas varicosas, las varices son venas dilatadas de apariencia retorcida que se hacen muy visibles a través de la piel, son de color azul o verdoso, y se deben a un trastorno llamado insuficiencia venosa crónica.

Al comienzo solo se perciben como venas muy notorias. Luego, cuando la enfermedad avanza, derivan en una variedad de síntomas desagradables, incluyendo:

• Dolor en las piernas
• Piernas cansadas o pesadas
• Picazón en las piernas
• Hormigueo
• Cambios de color o textura en la piel
• Picor alrededor de las venas dilatadas

Diversas situaciones pueden favorecer o acelerar el desarrollo de las varices, entre ellas el embarazo, el estreñimiento, usar ropa ajustada, pasar muchas horas de pie o incluso tomar duchas calientes con frecuencia.

¿Por qué aparecen las varices?

El sistema circulatorio comprende dos grandes redes de vasos sanguíneos: las arterias y las venas. La circulación venosa por su parte, también conocida como circulación de retorno, se encarga de regresar la sangre proveniente de los diferentes tejidos hacia el corazón.

A diferencia de las arterias, las venas poseen paredes delgadas y expandibles que permiten que la sangre fluya sin esfuerzos, y, además, cuentan con unas estructuras valvulares que favorecen el paso de la sangre únicamente en una dirección; siempre hacia el corazón.

Sin embargo, sea por antecedentes genéticos o factores de riesgo no controlados, las varices aparecen porque las válvulas presentan deterioros y fallan en su labor de retornar la sangre. Como consecuencia, las venas se cargan de sangre, se hinchan y sobresalen a través de la piel.

¿Qué tiene que ver el estreñimiento con las varices?

Aunque las venas dilatadas se deben a la insuficiencia venosa producto del fallo en las válvulas, situaciones como el estreñimiento aceleran este proceso.

¿Cómo afecta el estreñimiento a las varices? En este caso, el estreñimiento favorece al desarrollo de varices porque supone una presión continua sobre el abdomen. Cada vez que ejerces presión o fuerza al evacuar, tu abdomen se contrae y comprime las grandes venas en su interior, favoreciendo el retroceso y acumulación de la sangre.

Por esto, llevar una alimentación sana, tanto si se tiene antecedentes familiares o no, es una de las mejores formas de prevenir las varices o aliviar los síntomas.

¿Cómo mejorar mi alimentación para prevenir las varices?

Se dice que una dieta saludable es variada, posee todos los colores y es sostenible en el tiempo. En este caso, las verduras, la fibra, las frutas, los cereales y las legumbres, al favorecer el tránsito intestinal, deben ser los protagonistas al final de tu tenedor.

Los expertos aconsejan:

1. Limitar el consumo de alimentos fritos, embutidos, bollería y pastelería. Si bien de vez en cuando un gusto es inofensivo, estos ‘‘alimentos’’ contienen exceso de grasas hidrogenadas, azúcares y carbohidratos que finalmente son perjudiciales.
2. Incluir fibra en tus platos. Se recomienda entre 20 y 35 gramos de fibra al día, distribuidas en alimentos como el brócoli, la col, espinaca, acelga, frutas, frutos secos, harinas integrales y salvado de trigo.
3. Realizar al menos cuatro comidas al día. Dicen que lo que no se usa, se daña, y lo mismo sucede con el intestino. Para favorecer su actividad es recomendable comer varias veces al día en pequeñas porciones, preferiblemente desayuno, almuerzo, merienda y cena, con platos que van de mayor a menor proporción a medida que avanza el día.
4. Mantener un equilibrio proteico. Al ir al súper, opta por fuentes proteicas de origen animal, como carnes blancas y pescados, y de origen vegetal, como legumbres, cereales, vegetales y derivados de la soja. Limita el consumo de carnes rojas o procesadas, ya que además de condicionar a problemas de colesterol, también elevan el riesgo de cáncer de colon.
5. Bebe suficiente líquido. Para mantener las funciones vitales en orden es recomendable beber entre 2 a 2.5 litros de agua al día.

Una dieta saludable hará que te olvides de la preocupante pregunta de cómo afecta el estreñimiento a las varices. Pruébalo y mejora tu salud.

Otras recomendaciones para prevenir las varices

El estreñimiento no es el único factor predisponente de varices. Situaciones como viajes largos, exposición prolongada al calor, profesiones de riesgo o la obesidad también juegan un papel principal.

De acuerdo a los profesionales, todo paciente con venas dilatadas o con riesgo de padecerlas debe acudir a una evaluación médica para descubrir la causa y con medidas que se adapten a su condición antes de que la enfermedad avance.

 

En función de esto, el equipo médico de Centro de Estudio Vasculares te deja algunos consejos sobre varices para frenar el deterioro vascular:

• Da paseos, sube escaleras y mantente activo
  Permanecer muchas horas de pie o en una misma posición, fomenta el estancamiento de sangre en los lechos venosos. Siempre que puedas, toma un tiempo para movilizar tus piernas, sobre todo las pantorrillas.
• Ducha tus piernas con agua fría al final del día
  Es normal que con el paso del tiempo tus piernas comiencen a acumular cierta cantidad de líquido a medida que avanza el día. Para contrarrestar esto, es recomendable mojar tus piernas en agua fría al final del día y subirlas por encima del nivel del corazón. Esto favorece el flujo de sangre y el retorno venoso.
• Evita usar ropa muy ceñida
  Similar a lo que el estreñimiento hace, la ropa ajustada supone una compresión sobre las venas superficiales y comprometen el flujo de sangre.
• Evita los alimentos ricos en sal
  Como bien debes saber la sal contribuye a la retención de líquido y esto dilata aún más las venas, por lo que su consumo diario debe ser bajo.
• Acude con un especialista oportunamente
  Si ya implementabas estos hábitos en tu rutina diaria y aun así las varices persisten, acude cuánto antes con un profesional para encontrar la terapia que más se adapte a la severidad de tu condición.

En nuestro centro de estudios vasculares contamos con más de 20 años de experiencia en el tratamiento de varices en Madrid, partiendo desde un enfoque preventivo de la mano de tecnologías vanguardistas seleccionadas en función de cada paciente.

¿Te sigues preguntando de cómo afecta el estreñimiento a las varices? Aparte de la información proporcionada en este artículo te ofrecemos una ayuda profesional para mejorar tu salud. ¡Pregúntanos!